La limpieza es crucial

El verano está a la vuelta de la esquina, lo que significa que pronto estaremos disfrutando nuevamente de la deliciosa comida de la barbacoa. La barbacoa es una de las formas más populares de disfrutar de la compañía de familiares y amigos al aire libre. Sin embargo, después de un verano intenso de parrilladas y barbacoas, la limpieza de la barbacoa es una parte importante del cuidado y mantenimiento para garantizar una experiencia segura y saludable.
Uno de los primeros pasos para limpiar una parrilla es desmontarla completamente. Esto aislará la parrilla de cualquier residuo y suciedad acumulada que pueda haber durante el verano. Si nota alguna acumulación de restos de alimentos o suciedad, es importante limpiar la parrilla antes de reensamblarla.
El siguiente paso para limpiar una barbacoa consiste en eliminar la suciedad y la grasa. Esto se puede hacer con una toallita de papel, una esponja con jabón y un cepillo de cocina. Si hay alguna mancha particularmente resistente, puede utilizar un poco de agua caliente y un cepillo para eliminar la mancha más difícil. Si desea una limpieza más profunda, puede hervir agua en la parrilla para desintegrar el residuo.
Una vez que haya eliminado la grasa y la suciedad, la parrilla debe limpiarse con un poco de vinagre para reducir la cantidad de bacterias y restos de alimentos. Enjuague la parrilla con agua limpia y deje secar al aire libre antes de volver a armarla.
Pon un poquito de agua caliente en la parrilla, asegurándose de que esta apagada totalmente, espere unos 15-20 minutos. Deshazte del agua y vierte el agua de nuevo, pero esta vez algo más caliente. Con la ayuda del cepillo de metal se raspa por toda la para eliminar cualquier rastro de ceniza. A continuación, aplique el limpiador de grasa en toda la rejilla, o aceite de casa, el de toda la vida. Antes de hacer todo este proceso, cuando aun esta calentita, frotar con media cebolla toda la parrilla. Como decía mi abuelo: "mejor desinfectante no existe".
Es recomendable que por lo menos una vez al año, cuando acaba el verano, y la barbacoa ya no se usa tanto, empapar bien la rejilla en vinagre, dejar 30 minutos, y aclarar bien. Engrasar de nuevo, y guardar.